Declaración final y acuerdos de la Asamblea General ordinaria de FERE
La Asamblea General de la Federación Española de Religiosos de Enseñanza (FERE), reunida en Madrid, los días 24 y 25 de enero, que representa a dos mil centros educativos, en los que se escolarizan más de un millón de alumnos, ha realizado una autocrítica sobre la oferta educativa de sus centros y ha reflexionado sobre la presencia social de la FERE y sobre el actual estado del sistema educativo y, como fruto de esa reflexión, como Declaración final, adopta los siguientes acuerdos, que desea hacer llegar a las comunidades educativas, a los poderes públicos y, en general, a toda la sociedad y cuyo desarrollo encomienda a la Junta Directiva:
1.- Continuar el proceso de evaluación de nuestra oferta educativa, estableciendo un diálogo abierto con la Sociedad a la que servimos, que nos permita seguir profundizando en los aspectos que singularizan y legitiman a nuestros centros, como una oferta complementaria y en colaboración con la que realizan los centros públicos.
2.- Participar activamente en la escolarización e integración de los alumnos inmigrantes y de aquellos otros alumnos que están afectados por las nuevas formas de pobreza en nuestra Sociedad.
3.- Colaborar activamente para que la anunciada ley de calidad:
a) Dé respuesta a las deficiencias detectadas en el actual sistema educativo.
b) Establezca la gratuidad de la enseñanza desde los 3 años y la generalización del concierto educativo a estas enseñanzas.
c) Profundice en la autonomía efectiva de los centros públicos y de iniciativa social, en los aspectos pedagógicos, organizativos y de gestión, como un medio de satisfacción de la demanda social y de realización de una oferta educativa propia.
d) Se fundamente en el consenso como medio de asegurar actuaciones eficaces y duraderas, de las que se sientan partícipes todos los sectores afectados.
4.- Continuar impulsando la acción de FERE, como organización representativa de la titularidad de nuestros Centros, en los ámbitos de participación e interlocución social y en los servicios a sus afiliados.
5.- Hacer presente la voz y la singular aportación de nuestros Centros, asegurando la coherencia de todos los aspectos que inciden en los mismos (carácter propio, pedagógicos, organizativos, laborales, …).
6.- Apoyar la mejora de la calidad de nuestra oferta educativa y de la dirección y gestión de los centros en estos tiempos de misión compartida que nos conduce hacia modelos más participativos de escuela católica.