Educación católica financiada por el Estado en Inglaterra y Gales
En Inglaterra y Gales hay 2.203 colegios católicos: aproximadamente el 10% de todos los colegios del país, tanto de Primaria (3-11) como de Secundaria (11-19). Hay un pequeño número (109) de estos colegios católicos que cobran a los padres para cubrir sus gastos. Sin embargo, casi el 98% de los alumnos del sistema educativo católico de Inglaterra y Gales asisten a las 2.094 escuelas católicas que están financiadas por el Estado y no cobran ninguna cuota a los padres. Todos estos colegios reciben el 100% de su financiación del Estado, ya sea a través de la autoridad local o como una subvención directa del gobierno central. Esta financiación se calcula exactamente sobre la misma base que para los colegios estatales. Dependiendo del tipo de colegio, también reciben del Estado el 90% o el 100% de sus inversiones en inmobilizado. Estos acuerdos también se aplican a las escuelas dirigidas por otras iglesias y creencias. Alrededor de un tercio de todas las escuelas de Inglaterra y Gales son escuelas de la Iglesia.
Los colegios católicos son propiedad de la Iglesia y están dirigidos por un Consejo de Administración; la mayoría de sus miembros son nombrados por el Obispo diocesano (o el Superior Religioso en los centros dirigidos por una orden religiosa). El Consejo de Administración es el empleador de todo el personal y toma las decisiones sobre a quién contratar; tiene libertad para seleccionar a católicos practicantes para cualquier puesto y los obispos así lo exigen para los coordinadores y profesores de Educación Religiosa (ER). Al igual que todos los colegios financiados por el Estado, deben enseñar un currículo amplio y equilibrado, que incluya Educación Religiosa, Inglés, Matemáticas y Ciencias. Algunos tipos de centros también deben cumplir con el Plan de Estudios Nacional, que requiere una lista adicional de asignaturas (por ejemplo, Historia, Geografía, idiomas, Música, Arte y Diseño), con un contenido que debe enseñarse a varios o todos los grupos de edad junto con las asignaturas troncales de Inglés, Matemáticas y Ciencias. Dentro de estos parámetros, el currículo es decidido por el Consejo de Administración.
El contenido y el alcance de la Educación Religiosa en un colegio católico es un asunto exclusivo de la Iglesia. La Conferencia Episcopal ha establecido normas bajo el canon 804, y requiere dedicar a la asignatura un mínimo del 10% del tiempo del currículo. Ni la Educación Religiosa católica ni el culto pueden ser inspeccionados por los Inspectores del Estado, por el contrario, la ley exige que sean inspeccionados por el Obispo diocesano, y el Estado paga una subvención a la diócesis para sufragar el coste de la inspección.
Paul Barber
Director of Catholic Education Service de Inglaterra y Gales
Presidente de CEEC